
Lo cierto es que es una decisión un tanto arriesgada, puesto que la campaña navideña está a la vuelta de la esquina y tanto Microsoft como Sony ya han movido ficha rebajando el precio de sus máquinas y preparando interesantes packs. Aunque por otra parte, las consolas de la competencia han tenido que reducir su precio de una forma "obligada" ya que sus ventas no eran las previstas, mientras que Wii sigue siendo un éxito con el mismo precio con el que se puso a la venta.